Llavero y perchero, todo en uno.

Erase una vez...  unas cuantas llaves desperdigadas que decidieron unirse en asamblea para tener un lugar fijo donde cobijarse. Las de casa se conformaban con dormir en un cajón del recibidor, pero las del coche y las motos preferían algo mas pintoresco y divertido dónde cotillear sus idas y venidas.

Así nació la idea....

  

Como habréis imaginado, son tablillas de cajas de frutas,

                           

      

+ cuatro listones de madera encontrados lijados superficialmente y pintados con esmaltes acrílicos,

+  una plantilla casera para el estarcido hecha con papel vegetal.

+ unos imanes minúsculos que me regaló Beatríz (para que las puertas permanezcan cerradas), + unas bisagras, + unas alcayatas para madera que no se de donde salieron pero hay un montón en casa,
  

+ unas cuentas de madera a modo de pomos, personalizadas por esta menda, con motivos marineros + cordel.
  

No, no estáis viendo borroso...es que la foto es así para darle mas interés al asunto.(Mentira, es que son la 1,30 Am y me da una pereza enorme repetirla, ya me entendéis....) 

Aquí a pleno sol,

   
y aquí  ya en el ocaso.

Ya tiene su sitio en el despacho del gnomo, y funcionando a pleno rendimiento.(¡En esta casa es raro encontrar una percha vacía!)
Espero que os haya gustado
Besitos a porrón!!!!